PRENSA GAMEA | Vie 17.03.23
La restitución de derechos y el derecho a la familia para niños, niñas y adolescentes en situación de abandono o violencia, en centros de acogida de la urbe alteña, conlleva un proceso que garantiza el bienestar del menor. Esta ruta recorre al menos ocho pasos hasta descubrir un apego afectivo con los padres.
El responsable del Programa de Atención Niña, Niño y Adolescente en Centros de Acogida de El Alto, Grover Mamani Arenas afirmó que el 80% de los menores que se encuentran en los centros de acogida están por abandono y el resto, por violencia física, psicológica y trata y tráfico.
Una vez que llegan al Hogar 24 Horas se busca a la familia de origen y ampliada, si no se encuentra y se agota la investigación social, el caso pasa a conocimiento de juzgados y del programa ‘Equipo Hogar’, que nuevamente indaga con detalle, además fortalece y restituye los derechos fundamentales, en especial, a la familia.
Si el niño o niña en abandono no cuenta con un certificado de nacimiento se activa una demanda de filiación. Con el trámite precluido, se solicita a juzgados de la Niñez y Adolescencia que se pueda subir los casos de los niños al Sistema de Registro Único de Adopción Nacional e Internacional (RUANI), o bajo procedimiento, se asigna por sorteo a los padres adoptantes.
Los padres adoptivos deben solicitar la autorización de visitas para conocer al menor que les tocó, con esta autorización del juzgado de la Niñez y Adolescencia, se busca generar un apego emocional entre niños y padres adoptivos.
Luego, se instala una audiencia de preasignación para que el menos pueda salir del centro de acogida e ir a la casa o domicilio del padre o madre adoptante, ante el interés afectivo generado entre ambos.
Como séptimo paso, se hace un seguimiento psicosocial y legal del equipo técnico del juzgado, para que los informes sean favorables de acuerdo al seguimiento sobre el lugar donde vivirá el menor; además de un seguimiento psicológico, emocional, para ver el apego con el padre o madre adoptante.
Como octavo paso, se celebra una última audiencia de ratificación, donde leen los informes y si son favorables, se dicta la sentencia, con la que se restituyen los derechos a la familia del menor.
“Es decir que como Defensoría de la Niñez y Adolescencia velamos este derecho que es fundamental, el derecho a la familia para que estos niños puedan tener una familia sustituta”, dijo Mamani.
El funcionario público precisó que, durante 2022, 11 niños en la urbe alteña fueron adoptados; tenían entre cero y cinco años de edad, en cada uno de los casos se agotaron los procedimientos de investigación pertinentes.
SDC – DQA – DLP
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