PRENSA GAMEA | Vie 26.07.24
Con el paso de los años, Marcelina de 63 años no pierde la costumbre de degustar una dulce mandarina después del almuerzo, desde niña sus padres le daban esta fruta y se hizo costumbre. La dieta de los adultos mayores debe basarse en frutas y verduras.
Aunque ahora camina un poco más lento y ya no tiene la fuerza de antes, ella compra los víveres en el mercado. En su bolsa siempre lleva perejil y acelga para preparar una rica sopa, también coliflor, pese a que no le gusta mucho, pero sabe que las verduras aportan en su salud.
La nutricionista de la Unidad de Promoción y Prevención, de la Alcaldía, Ángela Vera explicó que a partir de los 60 años la alimentación debería ser equilibrada y variada, rica en fibra y vitaminas que se encuentran en las verduras y frutas.
Sin embargo, se puede variar con una selección de alimentos si el adulto mayor tiene alguna enfermedad de base, como diabetes, hipertensión arterial, enfermedad renal u otro mal. En cuanto a la consistencia, explicó que deben consumir alimentos más blandos, licuados y triturados.
“Nosotros recomendamos que coman bastante fibra, tomen bastante agua y aumenten el consumo de frutas y verduras; pero depende de la enfermedad de base, porque a los enfermos renales adultos mayores les prohibimos que tomen muchos líquidos, porque tienen retención de líquidos”, dijo Vera; en verbigracia, un enfermo renal no puede comer plátano, porque aumenta la insuficiencia renal aguda.
Este jueves se llevó adelante el taller ‘Cuidado en adultos mayores, valorizando sus costumbres’, en el consultorio vecinal Complemento Yunguyo II, ubicado en el Distrito 4, donde los adultos mayores aprendieron sobre alimentación saludable, flexionaron el cuero y aprendieron a consumir el alimento suplementario Carmelo.
Además fueron auscultados, recibieron sesiones de fisioterapia, nutrición, medicina tradicional y odontología, entre otros.
Matilde Paye, vecina de la zona Yunguyo, contó que su alimentación es algo restringida. Precisó que dejó de cenar y su último alimento del día es un té, también dejó de comer pan, fideo y productos con harina refinada.
“Me alimento más con lo que traemos del campo, también compro verduras, lechuga, betarraga, apio, acelga y otras verduras”, dijo Paye, quien ahora consume más avena y quinua.
Vera recomendó a los adultos mayores consumir bastante calcio para fortificar los huesos y recordó que este mineral se encuentra en la espinaca, brócoli, perejil y todas las verduras de color verde oscuro. En caso de que sean intolerantes a la lactosa, pueden consumir leche de soya y deslactosada.
Así mismo, encargó no cenar tarde, aplicar cuatro tiempos de comida, reducir sal, azúcar, frituras, comida recalentada, comida chatarra, caminar de 5 a 10 minutos para mejorar la digestión, fortificar los huesos, oxigenar el cuerpo y fortalecer los músculos.
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SDC