PRENSA GAMEA | Mar 27.08.2024
“Conocí al padre el 2019-2020, cuando hubo el conflicto social en nuestro país, fue la primera persona que me abrió las puertas, ahí hice mi primera entrevista en medios comunicación”. Frente a una capilla ardiente, en Jach’a Uta, la alcaldesa Eva Copa elevó oraciones y dedicó una semblanza particular al extinto padre Eduardo Pérez, a quien recordó por sus obras sociales y dedicación a Bolivia.
El toque de silencio irrumpió en la cotidianidad de la Casa Municipal, fue el momento para que funcionarios y visitantes al Jach’a Uta hagan un parón y se sumen al breve acto en memoria de Eduardo Pérez Iribarne.
La capilla ardiente en el consistorio alteño es, en estos días, el centro de oraciones. Alrededor de sirios, la imagen del sacerdote jesuita emula el féretro que desde hoy resguarda los restos mortales de Eduardo Pérez y que son velados en el templo de San Calixto, en la zona central de La Paz.
“Siempre ha sido una persona tan desprendida, quiero comentarles algo que me conmovió mucho de él, tener tanta sabiduría, por tantos años de vida que dedicó al país”, dijo la autoridad municipal, durante su alocución.
La noticia de la muerte del padre jesuita despertó miles de adhesiones de quienes lo conocieron o transcurrieron etapas de la vida. Eva Copa resumió la trayectoria de Eduardo Pérez por sus logros y obras sociales.
La memoria llevó a la mandataria municipal a recordar la última semana de enero, en 2024, cuando el clérigo bendice el estadio de Villa Ingenio, antes que sea habilitado para partidos internacionales y cuyas refacciones sumó el esfuerzo de la población y de funcionarios municipales.
Pero, Eduardo Pérez se destacó por competencias deportivas y campañas solidarias. “Él iba a ferias, mercados, juntamente con sus carros de fuego, ahí, a distribuir juguetes a todos”, afirmó la Alcaldesa.
Con una perora casi familiar, Eva Copa mencionó, en refilón, la competencia ciclística Doble Copacabana: “era un amante del ciclismo”, refirió la autoridad alteña. Los halagos conmemorativos prosiguieron y esta vez fue el turno de la labor periodística que tuvo el finado personaje.
Eduardo Pérez Iribarne, conocido como EPI, fue el director de Radio Fides desde 1986 hasta 2017. Para Eva Copa, el rol de comunicador del sacerdote dejó como enseñanza la virtud investigadora en los trabajadores de la prensa.
“¿Cuántos no conocían el programa El hombre invisible? Siempre decía: ¿quién está detrás de esa sombra?, aparecía el padre, un padre que ha enseñado ética, era crítico. Si a él no le gustaba, decía: ‘no me gusta’”, agregó la Alcaldesa.
El recuerdo inmediato de esa etapa comunicacional de Eduardo Pérez, para la alcaldesa alteña, fue la vez que tuvo su primera entrevista en Radio Fides. “Me dice: ‘Eva, anda, te van a entrevistar’, tenía miedo porque jamás había salido en medios de comunicación. Era un poco más joven, pero me habló de una forma tan paternal, teniendo tanta seguridad que empecé a salir en los medios”, explicó Eva Copa.
Los casi cuatro minutos de alocución cavilosa, de la autoridad edil, concluyeron en un mensaje que reflejó el agradecimiento que siente por la experiencia adquirida con el sacerdote. “A veces, el que menos tiene es el que más ayuda, hay que seguir ayudando. El ejemplo que nos ha dejado, el legado debe continuar”, enfatizó Eva Copa, en el epílogo del acto.
///
DLP